Cuando usamos un GPS resulta fundamental escribir muy bien el nombre, porque una pareja sueca tenía la intención de pasar unas estupendas vacaciones en Capri, que ciertamente es un hermoso lugar. Cuando llegaron a su supuesto destino, fueron a la oficina de información y allí le comentaron que estaban en Carpi y no en Capri, algo que fue una gran sorpresa ya que había usado el GPS, pero introdujeron mal el nombre del lugar al que querían ir.

Este error supuso que se encontraran a 650 kilómetros de su verdadero destino, que no era otro que Capri, muy parecido en el nombre pero con unas letras cambiadas es un lugar totalmente diferente. Ya ven que introducir mal el nombre de la ciudad puede pasarte factura y llegar a un lugar diferente del que tenías pensado y muy alejado del destino final de esta pareja de suecos, que ciertamente se quedaron con la boca abierta cuando conocieron que no estaban en Capri.

Lo curioso de todo es que Capri es una isla y llegar allí es bastante diferente a llegar hasta la ciudad de Carpi, por lo que los turistas tampoco atendieron a las indicaciones ni al lugar donde se encontraban, sino que simplemente se dejaron guiar por el GPS, que hizo muy bien su función, ya que el error fue humano al introducir mal el nombre. Esto supuso un retraso de más de medio día con respecto a su destino original, pero seguro que aprenderán la lección para la próxima vez.