Hace varias semanas hasta octubre hay una ley en Roma que impide a habitantes romanos como a visitantes a no consumir ningún tipo de comidas ni bebidas cerca de los monumentos ni por supuesto dentro de alguno de ellos. Es una medida que lo que intenta es garantizar la limpieza de todos ellos ya que es normal poder ver algunos restos de alimentos e incluso papeles. Lo que no se podrá hacer tampoco es mientras esperamos para poder entrar a algunos monumentos es consumir algún tipo de alimentos.

Es ciertamente una media polémica ya que te impide poder comer y ahorrar tiempo mientras espera para entrar en algún sitio. Desde el ayuntamiento de Roma intenta así preservar y conservar todos los monumentos y desde luego es una media al menos que logrará eso. Si incumples esta ley puedes ser castigado hasta con 50 euros de multa.

Los turistas se muestran inconformes con esto ya que ven que es algo que les perjudica mucho ya que les hará gastar más dinero en terrazas y demás bares cercanos. De todos modos siempre cabe la posibilidad de consumir esos mismos productos en forma de sandwich o patatas fritas fuera de las cercanías de los monumentos.

Lo que resulta curioso es lo que se considerará cerca y lejos ya que de momento no se han indicado una serie de metros para ellos por lo que habrá problemas seguramente con esto ya que para ti puede ser lejos cuando para los policías puede ser cerca.